ENCONTRAR EL LENGUAJE

Estaba leyendo estos días en el blog de Isol que ella andaba probando distintos inicios para un libro, y que no le encontraba el lenguaje.
Como siempre, uno (yo, o sea :D) parte de una idea, y luego generaliza a cosas medio extrañas :D

Y bueno, estaba yo en un asunto parecido (sin tener en cuenta que las ideas que debe tener esa piba son veinte veces mejores que la mejor idea que pueda tener yo -que uno para eso signifique un freno es otra cosa, jajajaja, que lo que no tengo de genio lo tengo de caradura xDDD), con un concurso en el que hay que presentar unos relatos cortos (mal llamados hiperbreves por los organizadores, pero bueno... todo no se puede -Asokita, te están esperando-), y hasta que me decidí por uno, había escrito siete previos. El octavo me gustó, y era totalmente contrario a lo que quería escribir en los otros siete, algo oscuro y tenebroso, o terrible, del destino humano, sea por los horrores extranaturales, el mal que asoma en el corazón del hombre, una diosa intergaláctica -inspirado en una ilustración del gran Bruce Pennington-, una diosa mapuche, una relación de pareja basada en una canción del gran Rubén Blades y... no recuerdo qué temas más.

Y eso, que uno a veces no encuentra la letra de las cosas. O mejor, la imagen es tan clara que no hay manera de expresarla.

Y nada... Un post totalmente al dope... Un día de estos levanto los relatos que escribí para el concurso.

Saludos, buen fin de semana, y gracias por leerme