SOBREVIVIR, EN ESTOS TIEMPOS

Pasando lo pasado, viendo lo que se ha visto, y escuchando lo que se ha escuchado, uno llega a la conclusión sencilla de que, para sobrevivir a las mentiras, a la sobrecarga de información, a la falta de criterio, a las conveniencias, a... bastantes cosas más que sería largo de enumerar... uno debería ser, como dice la canción de Shakira, ciego sordomudo.


Tal vez, sumergido en la oscuridad más profunda, en el silencio más cercano a lo absoluto que pueda haber, sepamos elaborar pensamientos propios, criterios propios, ideas propias, decisiones propias, conocernos, reconocernos.


Pensamiento surgido tras semanas de conflicto entre el interior del país y el matonaje peronista que gobierna la Argentina, entre acusaciones de mentirosos entre mentirosos (o sea que, cosa rara, ambos decían la verdad), entre análisis "profundos" que no llegan a la cantidad de metros de un subterráneo, y mi convicción cada vez más profunda de que los gobiernos, la política entendida como "satisfacción de intereses personales y -a veces- de personas cercanas", la economía entendida como "negocios", las patrias, los escudos, las banderas, deben ser abolidas. Qué quedará, no sé, pero en la tarea de repensar qué queremos de nuestro tiempo en esta vida, si queremos continuar con este mundo actual poblado de muertes y asesinatos sin sentido, o reemplazarlo por otro donde vivamos tal vez sin ninguna comodidad moderna, pero en paz, felices, llenos, plenos, definamos de qué estamos hechos, qué puebla nuestro corazón